Eduardo Mendoza - 2008
Es una novela satírica que busca, de algún modo, parodiar y ridiculizar el éxito que en los últimos tiempos han cosechado las obras con referencias históricas que cuestionan acontecimientos históricos y religiosos.
Situada en el Siglo I, mezcla humor, crítica y aventuras. Nos narra la vida de un romano llamado Pomponio que se dedica a buscar por todo el imperio unas aguas que tienen propiedades excepcionales.
Su llegada a Nazaret es el inicio de este relato divertido y excéntrico. Pomponio de manera casual, y ante su falta de medios de supervivencia, se ve involucrado en la defensa del carpintero del pueblo, acusado del asesinato de un rico ciudadano. El carpintero, de nombre José, tiene un hijo pequeño que es quien contrata a Pomponio, se llama Jesús, y su madre María, y es a partir de este hecho donde comienza una curiosa actividad de detective para aclarar lo sucedido.
Todos los personajes que van apareciendo en el transcurso de las investigaciones que lleva a cabo el protagonista para demostrar la inocencia de José, como los abuelos Joaquín y Ana, su primo Juan, los sumos sacerdotes del templo de Jerusalén, e incluso una prostituta y su hija, gran amiga de Jesús, que puede relacionarse con el personaje de María Magdalena, guardan algún secreto relacionado con conflictos políticos y religiosos, incluso se citan recalificaciones de terrenos ya en esa época. Estas situaciones las desarrolla el autor de un modo satírico e irreverente, que finalmente se resuelve de un modo previsible.
Es una obra irónica de 192 páginas, entretenida, original y recomendable.
Situada en el Siglo I, mezcla humor, crítica y aventuras. Nos narra la vida de un romano llamado Pomponio que se dedica a buscar por todo el imperio unas aguas que tienen propiedades excepcionales.
Su llegada a Nazaret es el inicio de este relato divertido y excéntrico. Pomponio de manera casual, y ante su falta de medios de supervivencia, se ve involucrado en la defensa del carpintero del pueblo, acusado del asesinato de un rico ciudadano. El carpintero, de nombre José, tiene un hijo pequeño que es quien contrata a Pomponio, se llama Jesús, y su madre María, y es a partir de este hecho donde comienza una curiosa actividad de detective para aclarar lo sucedido.
Todos los personajes que van apareciendo en el transcurso de las investigaciones que lleva a cabo el protagonista para demostrar la inocencia de José, como los abuelos Joaquín y Ana, su primo Juan, los sumos sacerdotes del templo de Jerusalén, e incluso una prostituta y su hija, gran amiga de Jesús, que puede relacionarse con el personaje de María Magdalena, guardan algún secreto relacionado con conflictos políticos y religiosos, incluso se citan recalificaciones de terrenos ya en esa época. Estas situaciones las desarrolla el autor de un modo satírico e irreverente, que finalmente se resuelve de un modo previsible.
Es una obra irónica de 192 páginas, entretenida, original y recomendable.
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